La lactancia materna, como todo, tiene sus etapas, y es importante saber en qué momento te encuentras, para poder entender qué está pasando en tu cuerpo. Por ello, las matronas de Happymami han creado este post especialmente para ti. Lactancia materna, entiende sus fases y fisiología hasta destete.
Etapas para la instauración de la lactancia materna
Fases de la lactogénesis
Parece sorprendente, pero a partir del 5º-6º mes de embarazo, ya podrás tener una pequeña cantidad de leche materna. Esta etapa se la denomina lactogénesis I. Y tras el parto, llegará la lactogénesis II, con una producción abundante de leche materna y que es popularmente conocida como “subida de la leche”. Y por último llegará la galactopoyesis o lactogénesis III. Que es el proceso que mantiene la producción de leche una vez establecida la lactancia materna.
A diferencia de otros mamíferos, la lactogénesis II o subida de la leche se inicia unos días después del parto. Estos días representan un período crítico para la lactancia materna, ya que es cuando se originan gran parte de las dificultades para el amamantamiento.
Regulación de la síntesis, secreción y expulsión de leche
Aunque son los cambios hormonales maternos que se producen en el postparto, los que desencadenan la subida de la leche materna, son la succión y vaciado frecuentes de la mama. Si hablamos de los procesos producción y eyección, actúan varios sistemas de regulación. Todos ellos fuertemente influidos por la succión del bebé y otros estímulos sobre el pezón.
Prolactina
Durante el embarazo, en respuesta al aumento de los niveles de estrógenos y progesterona, la hipófisis produce prolactina. Ésta estimula la producción láctea. Sin embargo, durante el embarazo, se mantiene inactiva debido a que la progesterona y el lactógeno placentario que impiden la unión de la prolactina a sus receptores (unión competitiva). Después del parto, los niveles de estas dos hormonas disminuyen rápidamente y la acción de la prolactina deja de ser bloqueada, iniciándose la secreción de leche materna.
Tras el parto, la liberación de prolactina se produce en pulsos tras diversos estímulos, siendo el más eficaz la succión del pezón. El pico máximo de concentración plasmática de prolactina se produce, aproximadamente, 20-30 minutos después de la succión, de manera que su efecto más importante es producir leche materna para la siguiente toma. De ahí el dicho, “cuanta más succión, más producción”. Este efecto es de particular importancia cuando se está estableciendo la lactancia materna, ya que después de algunas semanas no existe relación entre la cantidad de prolactina y la cantidad de leche materna producida.
Oxitocina
La oxitocina es liberada en respuesta al estímulo del pezón, por succión o manipulación; y en respuesta a estímulos físicos, visuales, sonoros o emocionales agradables, generalmente, relacionados con el bebé.
Esta hormona es responsable de la contracción de las células que envuelven los alvéolos produciéndose la eyección láctea. Facilitando el desplazamiento de la leche materna por los conductos hacia el pezón.
Este proceso se produce de forma continuada durante la succión y consigue volver a rellenar los conductos a medida que van quedando vacíos. Es importante tener en cuenta, que el estrés, la ansiedad y otros estímulos físicos repentinos desagradables pueden bloquear el reflejo de eyección de la oxitocina.
Otros factores de regulación
La retención de leche materna dentro de los alvéolos aumenta la presión intraalveolar, afectando a la función de las células alveolares, además puede comprometer la vascularización y dificultar la llegada hormonal, frenando la producción láctea cuando el pecho materno está lleno o no existe un drenaje eficaz de la glándula.
Tu bebé anula estos efectos inhibidores mediante el vaciado adecuado de tu pecho. De este modo, la producción de leche materna se adapta a las necesidades de tu bebé, de una toma a otra e independientemente para cada pecho.
Lactogénesis II. La subida de la leche
Como hemos mencionado, el inicio de la lactogénesis II o “subida de la leche” se produce tras el descenso brusco postparto de la progesterona y lactógeno placentario. Durante esta fase aumenta la síntesis de los componentes de la leche materna y esto provoca que las mamas aumenten de tamaño y estén calientes y dolorosas. No hay relación entre la intensidad de los síntomas y la producción posterior de leche materna.
Clínicamente, la “subida de la leche materna” ocurre en torno al tercer día postparto, pero hasta un 25% de las madres perciben la subida después de las 72 horas. En ese momento, tu bebé extrae alrededor de 20 cc de leche materna en cada toma.
Factores favorecedores de la lactogénesis y de la lactancia:
- El contacto precoz de la piel de la madre con la del hijo.
- El inicio del amamantamiento en la primera hora tras el parto.
- El amamantamiento frecuente.
- Buen acoplamiento boca-pecho.
- El vaciado adecuado de la mama.
- La succión precoz y frecuente en los primeros días.
Factores que dificultan o retrasan la lactogénesis:
- La obesidad y la diabetes insulinodependiente mal controlada influyen en el retraso de la “subida” que se observa en madres diabéticas y obesas.
- La retención de restos placentarios, por la presencia de progesterona y lactógeno placentario, puede llegar a inhibir la lactogénesis II.
- Los partos difíciles y el estrés son otra de las causas y la que más se ha asociado con el abandono precoz de la lactancia. En la madre, el estrés actúa bloqueando el reflejo oxitócico; en el lactante puede alterar la adaptación al pecho o provocar una succión débil.
Galactopoyesis. o estabilización de la leche
Una vez iniciada la producción abundante de leche materna, la cantidad depende de la eficacia y la frecuencia del vaciado de la mama. Además del volumen, la succión puede regular, en parte, la composición de la leche. La leche materna se va fabricando de forma continua y queda almacenada hasta la toma siguiente en el interior de los alvéolos y en el sistema de conductos. Guía lactancia materna.
Destete, ¿cómo hacerlo?
Como todo en esta vida, finalmente, también habrá una etapa en la que se le ponga fin a vuestra la lactancia materna, y entenderla como hacerlo es importante. Es bien sabido que la recomendación de la OMS y las guías clínicas es de 6 meses de forma exclusiva y complementaria junto con alimento hasta los dos años, incluso está descrita hasta los 7 años. No hay razón para el cese a una edad determinada, pero obviamente esta decisión será toda tuya, y en Happymami, vamos a acompañarte y darte la mejor solución para la decisión que tomes.
Circunstancias que pueden condicionar el fin de la lactancia o “destete”
Y, ¿qué motivos pueden motivar el destete?. Cada caso es único y todos respetables, siento los más importantes, por decisión materna, por voluntad del bebé, por enfermedad de la madre o del lactante o por necesidad laboral. Recordarte que tienes a tus disposición nuestro post sobre la baja por maternidad. y baja paternal.
Tipos de destete
En teoría, se habla de 4 tipos de destete, de pendiente de la causa del mismo.
- Destete inevitable por causas médicas u otras. La realidad es que hay pocas enfermedades y medicamentos que contraindiquen la lactancia materna. Siempre puedes consultar la web e-lactancia.org para cualquier medicación salir de dudas. Guía problemas lactancia materna
- Destete voluntario por parte del niño: Veras como tu bebé decide no mamar de forma progresiva. Existe ocasiones que puede estar condicionado por un nuevo embarazo, el cual en ocasiones puede alterar el sabor y la cantidad de la leche materna.
- Destete por decisión materna: La decisión propia de continuar dando lactancia materna o no es legítima, y no debes de aceptar juicios de valor por tomar la decisión que consideres. Infórmate siempre sobre los pros y contras y tomarás la mejor decisión para tu caso. Como nota personal, no puedes cambiar lo que piense la gente, pero sí cómo te afecta, y lo estas haciendo genial.
- Destete forzado por causas externas. Sociales o familiares. Ajenas a la madre y al niño. Recordarte que la decisión de seguir o no ofreciendo a tu lactancia materna es sólo tuya.
- Destete inadvertido. Progresivamente se van distanciando las tomas hasta que tu bebé se desteta.
Sentimientos pueden surgir durante el destete:
Durante esta etapa de destete pueden surgir muchos sentimientos, como culpa y tristeza, y es totalmente normal. Apóyate en tu matrona, te apoyará en tu decisión, ayudándote en tu caso con lo que conseguirás llevarlo mejor y entender el proceso. Debes saber que por un lado, tu bebé, si el destete ha sido decisión tuya, puede mostrar rabietas o un llanto inconsolable. Ésto es debido a que como bebé lactante, si tiene hambre piensa en su teta que le encanta y le satisface, y obviamente no entiende el caso de que no pueda usarla. Y por el contrario, si la lactancia materna estaba suponiendo un estrés para ti y una dificultad para vuestro vínculo mamá y bebé, se percibirá como un alivio para los dos.
Pautas para realizar un destete
Para realizar un destete hay varias opciones, y si hablas con otras mamás, cada una utilizó un método distinto y a unas le fue bien y otras mal, cada caso es distinto y deberás de adaptar estas recomendaciones siempre a vuestro caso particular. Por un lado debes saber que, que en tu caso realizas un destete de la noche a la mañana, tu médico puede recomendar medicación específica para cortar la leche. Si por el contrario realizas un destete progresivo, poco a poco las tomas se irán espaciando y disminuyendo la producción de leche materna.
Cómo hacer un destete progresivo:
Existen varias estrategias que puedes optar para realizar un destete que nos recomienda la AEPED:
- No ofrecer, no rechazar. Si no pide tomar pecho, no ofrecérselo. Si lo pide, no rechazarlo.
- Espaciar tomas. Distraerle de otra forma (en el parque, jugando con él, leyendo un cuento, adormecerle en brazos…).
- Ofrecer otro tipo de alimento en las horas que suele pedir pecho. Anticiparnos a su necesidad.
- Gestionar con el niño las tomas. Decirle que “sólo en casa”, “solo 3 minutos”, “solo un pecho”, “solo para dormir”, etc.
- Debemos hablar con él y acordar con él el destete, explicándole que “mamá no quiere seguir dando tetita”.
- Si hay dolor hay que hacer extracciones periódicas para evitar complicaciones como mastitis. Si el destete es bien tolerado no será necesario.
Falsos destetes:
Recuerda, que hay crisis de lactancia y no significan que sean un destete. Estas huelgas de la lactacnia materna, son totalmente normales, en las que tu bebé verás como que pierde un poco el interés por mamar, como por ejemplo si están malitos, por un susto durante el amamantamiento anterior o porque se le ha forzado a mamar. ¿Por qué llora mi bebé?.
Conclusión lactancia materna, entiende sus fases y fisiología hasta el destete
Como hemos visto, son varios los factores que influyen en la formación y eyección de leche, todos ellos fundamentales para la correcta instauración de la lactancia materna. La prolactina y la oxitocina serán las hormonas fundamentales, en este proceso, pero necesarias de un funcionamiento en conjunto del sistema. Desde Happymami, recordarte que puede ser un proceso difícil al principio, pero después será muy fácil. Confía en ti, en tu bebé y en el equipo de sanitarios de tu alrededor, como tu matrona, que te ayudarán a conseguir tu lactancia materna.
Beneficios de la lactancia materna
La leche materna es única. Es un líquido vivo que está especialmente diseñado para el bebé humano y que cambia, toma a toma, día a día y mes a mes, para satisfacer las necesidades de tu bebé. Además proporciona defensas activas frente a la infección. Si te interesa, puedes descubrir más información sobre la importancia de la leche materna.
Beneficios para tu bebé
- Protege frente a las infecciones respiratorias, otitis, infecciones gastrointestinales e incluso urinarias.
- Protege frente al Síndrome de Muerte Súbita del Lactante.
- El amamantamiento proporciona contacto físico a los bebés lo que les ayuda a sentirse más seguros, cálidos y consolados.
- Los niños amamantados tienen un mejor desarrollo dental con menos problemas de ortodoncia y caries.
- Potencia el desarrollo intelectual gracias a que la leche materna tiene componentes específicos que son fundamentales para el desarrollo del cerebro.
- La leche materna se digiere mejor y tiene efectos positivos a largo plazo sobre la salud del niño disminuyendo el riesgo de que padezca alergias, diabetes, enfermedad celíaca, enfermedad inflamatoria intestinal, obesidad, hipertensión o cifras altas de colesterol.
- Parece tener cierta protección frente a linfomas y algunos otros tipos de cáncer.
- La leche humana es el alimento de elección para todos los niños, incluidos los prematuros, los gemelos y los niños enfermos.
Beneficios para la mamá
- Previene las hemorragias post‐parto, ya que la succión del bebé facilita que el útero recupere su tamaño inicial y disminuye la posibilidad de anemia.
- Favorece la recuperación del peso preembarazo.
- Produce bienestar emocional y proporciona una oportunidad única de vínculo afectivo madre-hijo.
- Reduce el riesgo de cáncer de mama y de ovario.
- Mejora el contenido en calcio de los huesos al llegar a la menopausia.
Beneficios para la sociedad y el medio ambiente
- Es gratuita. Supone un ahorro en concepto de fórmulas artificiales
- Al disminuir las infecciones y la gravedad de las mismas reduce los gastos médicos y los problemas laborales y familiares que dichas enfermedades suponen para los padres y la sociedad. Reduce el uso de recursos humanos y materiales de la sanidad y si los niños enferman, se recuperan antes.
- La leche materna es un recurso natural que no contamina y protege el medio ambiente ya que no produce residuos, ni necesita envases ni tratamientos especiales que requieran gasto energético en su elaboración ni emisiones de CO2.
¿Existen contraindicaciones para amamantar?
Hay muy pocas situaciones en las que estará contraindicada a lactancia materna, pero son mínimas. Esto quiere decir que, casi el total de las mujeres podrán alimentar a sus bebés con su leche materna, si lo decidieran así. Las contraindicaciones son:
- Madre con infección por VIH: en nuestro medio se considera una contraindicación verdadera.
- Galactosemia: es una enfermedad con la que nacen muy pocos bebés que no les permite digerir la lactosa de la leche, por lo que contraindica la alimentación con leche materna.
¿Cómo preparo mis pechos para la lactancia durante el embarazo?
No hace falta hacer nada para preparar el pecho para la lactancia materna durante el embarazo. Lo que sí es recomendable, es informarse bien sobre el tema. Puedes acudir a las clases de preparación para la maternidad impartidas por matronas. Busca ayuda, apoyo, consejo e información de profesionales expertos en lactancia materna (enfermeras, matronas, ginecólogos, pediatras, médicos de familia…). Pregunta todo lo que necesites o te preocupe. Habla con tu pareja, comparte la información, para que podáis decidir juntos. Habla con otros miembros de la familia para organizar una pequeña red de apoyo en el domicilio y así poder dedicarte con tranquilidad a disfrutar de la lactancia y conoceros tu bebé y tú.
El inicio de la lactancia materna tras el parto o cesárea
Es muy importante iniciar la lactancia materna tras el nacimiento tan pronto como sea posible, independientemente de cómo haya sido el nacimiento del bebé. Se recomienda, siempre que el estado del niño y de la madre lo permitan, que la madre y el recién nacido permanezca en contacto piel con piel tras el parto, al menos las dos primeras horas, o hasta que el bebé haga la primera toma al pecho.
Tu bebé, tiene unas capacidades innatas, que si le dejamos, se pone en marcha tras el nacimiento. Puesto boca abajo sobre tu abdomen, gracias a sus sentidos (sobre todo el tacto y el olfato) y a sus reflejos, es capaz de llegar por sí sólo a tu pecho. Reptando hasta él, lo olerá, lo tocará con las manos y posteriormente con la boca y finalmente, será capaz de agarrarse al pecho espontáneamente, con la boca totalmente abierta, abarcando el pezón y gran parte de la areola. Descubre más información sobre las etapas de la lactancia materna.
El calostro, un superalimento
En esta primera toma, descubrirá el calostro. Es la primera leche que la glándula mamaria produce durante los últimos meses de embarazo y primeros días tras el parto y proporciona a tu bebé todo el alimento que necesita esos primeros días. Es muy denso y de color amarillo y la mamá no nota los pechos llenos. Este líquido es rico en calorías, proteínas, anticuerpos y betacarotenos, mientras que es más bajo su contenido en grasa y lactosa.
Poco a poco la leche se irá haciendo más blanca y ligera y aumentará la cantidad (leche madura) de acuerdo a las necesidades de tu bebé. Clínicamente, la “subida de la leche materna” ocurre en torno al tercer día postparto, pero hasta un 25% de las madres perciben la subida después de las 72 horas. En ese momento, tu bebé extrae alrededor de 20 cc de leche materna en cada toma. Ten en cuenta que si tu bebé realiza chupeteos de sus manos, no son consecuencia del hambre, son reflejos de un niño normal y sano.
Factores favorecedores del inicio de la lactancia materna y la subida de la leche.
- El contacto precoz de la piel de la madre con la del hijo.
- El inicio del amamantamiento en la primera hora tras el parto.
- El amamantamiento frecuente.
- Buen acoplamiento boca-pecho.
- El vaciado adecuado de la mama.
- La succión precoz y frecuente en los primeros días.
¿Cómo reacciona tu bebé los primeros días de lactancia materna?
Generalmente los recién nacidos tienen una fase de unas dos horas, nada más nacer, en las que se encuentran muy despiertos y activos. En este periodo de tiempo, la mayoría consigue realizar su primera toma al pecho espontáneamente durante el contacto precoz piel-piel. Después pasan a una fase de sueño (letargo fisiológico, de “recuperación” del parto) que puede durar entre 8 y 12 horas. Durante esta fase, si se le mantiene en contacto piel con piel, el bebé volverá a tomar el pecho cuando lo necesite.
A partir del primer día de vida lo habitual es que tu bebé mame frecuentemente, unas 8-12 veces al día o más y que las tomas sean irregulares y más frecuentes por la noche. Sin embargo, algunos lactantes continúan muy adormilados, piden poco y maman menos de lo que necesitan. En estos casos conviene colocarlos en contacto piel con piel, lo que ayuda a que respondan al olor de la madre y mamen de forma espontánea. En ocasiones, puede ser necesario ayudarlos a despertarse desnudándolos y volviendo a vestirlos, dándoles un masaje rotatorio en la planta de los pies o una suave caricia en la espalda de abajo a arriba. Te dejamos un enlace por si necesitas más información sobre despertar o no a tu bebé.
¿Le doy los dos pechos?
En esta primera etapa, en cada toma hay que darle al niño ambos pechos, siendo necesario que vacíe completamente un pecho antes de ofrecerle el segundo para que obtenga así la leche del final de la mamada, que al tener mayor contenido en grasa, hace que el niño crezca y engorde. Es mucho más importante dejar que el niño termine de tomar el primer lado antes de ofrecerle el segundo, aunque esto signifique que rechace el segundo lado durante esa toma. No debes limitar el tiempo en las tomas. Es mejor permitir que el niño mame hasta que muestre señales de satisfacción, tales como soltarse él solo o tener los brazos y las manos relajados. Si tarda mucho se debe meter el dedo meñique presionando el paladar para así evitar que se dañe el pezón. No es necesario lavar el pecho antes ni después de cada mamada ni se debe usar jabón sobre los pezones ya que los reseca.
Número de tomas
Es importante ofrecer el pecho a demanda, siempre que el bebé lo requiera y todo el tiempo que quiera. De esa manera estaremos seguros de que recibirá todo lo que necesita, unas veces será alimento, otras calor, cariño o protección.Cada niño es diferente y necesita su tiempo para alimentarse, lo mismo nos sucede a nosotros (no todos comemos a la misma velocidad).
Los primeros días necesitan mamar entre 8 y 14 veces al día, por dos motivos fundamentales: el pronto establecimiento de la lactancia materna y la disminución del riesgo de que se produzca una hipoglucemia del lactante. No conviene no utilizar pautas estrictas de alimentación, ya que inhiben las interacciones naturales madre-hijo, interfieren los ciclos naturales del hambre y producen ansiedad en la madre.
Los signos más precoces de hambre son el chupeteo, cabeceo, sacar la lengua, llevarse las manos a la boca… Este es el momento ideal para ponerlo a mamar. No es bueno esperar a que llore para ponerlo al pecho ya que el llanto es un signo tardío de hambre y no será fácil que se agarre al pecho hasta que se haya tranquilizado. Aquí te dejamos un post sobre el llanto y su significado según el tipo.
Técnicas de lactancia materna
La mayoría de los problemas de lactancia se deben a problemas en la técnica de lactancia, bien por una posición inadecuada, un agarre no correcto o una combinación de ambos.
Para un buen agarre es importante que todo el cuerpo del bebé esté enfrentado a la madre, y que al abrir la boca introduzca gran parte de la areola, especialmente por la parte inferior (donde tiene la barbilla) para que al mover activamente la lengua no lesione tu pezón.
Los signos que nos indicarán un buen agarre son:
- El mentón de tu bebé toca tu pecho
- La boca de tu bebé está bien abierta
- El labio inferior está hacia fuera (evertido)
- Las mejillas estén redondas o aplanadas (no hundidas) cuando succiona.
- Se vé más areola por encima de la boca que por debajo.
Posiciones que te ayudarán en la lactancia materna
Independientemente de la postura que adoptes con tu bebé para las tomas. Existen unos tips básicos que debes tener en cuenta y que facilitarán el agarre de tu bebé. Porque no existe una única posición adecuada para amamantar, lo importante es que la madre esté cómoda, que el agarre sea adecuado, y que el bebé esté enfrentado y pegado al cuerpo de la madre.
- Como mamá, debes sentirte cómoda con la postura. Para ello, la utilización de almohadas o cojines puede resultarte útil.
- El cuerpo de tu bebé, debe estar en estrecho contacto con el tuyo. Cuando estés recostada, el peso de tu bebé descansará sobre tu cuerpo. Así, resultará más fácil mantener ese contacto estrecho que facilita la puesta en marcha de los reflejos de tu bebé.
- La cabeza de tu bebé, debe de estar frente al pecho, bien alineada con el cuerpo. (Su cuello no debe de estar flexionado, ni la cabeza girada). Es preferible mover al bebé que mover el pecho de la madre.
- El mentón de tu bebé, debe de estar apoyado en el pecho con el pezón por encima del labio superior, a la altura de la nariz. Así, cuando tu bebé ponga en marcha el reflejo de búsqueda y agarre tu pecho, el cuello quedará en ligera hiperextensión, facilitando la coordinación, succión, deglución, respiración.
- Recordarte que es preferible favorecer el afianzamiento espontáneo. Cuando la boca de tu bebé esté bien abierta, acércale al pecho y permite que sea tu bebé quien lo agarra. Si tu bebé no lo consigue, puede ser útil el agarre dirigido
Posturas favorecedoras del inicio de la lactancia materna
A continuación te mencionamos algunas posturas que pueden favorecer el inicio de una lactancia materna feliz y duradera. Descubre más información sobre las posiciones de lactancia materna
- Posición de cuna:
- Como mamá, sujeta el cuello y la cabeza de tu bebé con el mismo brazo y mano del pecho que ofrece
- Posición recostada:
- Colócate de lado de forma que tu pecho descanse sobre el colchón
- Esta postura es especialmente útil para favorecer el descanso materno cuando existe dolor en el periné, (parto instrumental, hemorroides…)
- Posición de rugby:
- Sujeta el cuerpo y la cabeza de tu bebé con el antebrazo y la mano del mismo pecho que vas a dar. Así, te queda una mano libre para poder realizar un agarre dirigido si lo precisas.
- Esta postura es especialmente útil en cesáreas, madres con mamas muy grandes o con obesidad mórbida o en amamantamiento simultáneo en gemelos.
- Posición de crianza biológica:
- Posiciónate semi recostada (entre 15º-65º) y cómoda
- Esta postura es especialmente útil cuando existen dificultades con el agarre, ya que facilita que el recién nacido ponga en marcha sus reflejos instintivos. Verás cómo tu bebé cabecea y se desplaza buscando el pecho de la madre.
¿Cómo interrumpir la succión del bebé?
Interrumpe la succión antes de retirar el bebé de tu pecho. Hazlo poniendo un dedo limpio en el lado de la boca de tu bebé, entre sus mandíbulas. No lo retires hasta que notes que ha terminado. O introduce el dedo meñique presionando el paladar para así evitar que se dañe el pezón.
¿Tengo que realizar algún cuidado especial del pecho durante la lactancia?
Tu pecho, no necesita ningún cuidado especial durante el embarazo y la lactancia materna. Realiza una higiene diaria, y será suficiente. Además, utiliza ropa interior práctica y con sujeción suficiente, que te hará sentir más cómoda.
¿Cómo saber si mi bebé está comiendo lo suficiente?
Para saber si tu bebé está realizando bien las tomas, puedes tener en cuenta:
- Frecuencia de las tomas: Tu bebé deberá realizar entre 8 y 12 tomas cada día.
- Deposiciones: Cuenta los pañales cuyo contenido sea del tamaño del círculo que forma al tocar las puntas del pulgar e índice.
- 1-2 días de vida, 1-2 pañales mojados, meconio variable
- 2-6 días de vida, 5 -8 pañales mojados, al menos 3 deposiciones verdosas
- 6 días a 6 semanas, 5-6 pañales mojados, al menos 3 deposiciones amarillo mostaza
- Más de 6 semanas, 5-6 pañales mojados, algunos bebés hacen menos deposiciones pero mayor volumen y blandas.
- Apariencia y estado general: Que tenga un color normal, la piel es firme y además se encuentra activo y alerta.
- Aumento de peso y crecimiento: Este apartado será valorado por tu pediatra o enfermera de pediatría
Descubre más información para saber si tu bebé está tomando suficiente leche haciendo click aqui
¿Qué debo comer mientras doy lactancia materna?
La mujer que amamanta no precisa dietas especiales. La mejor alimentación proviene de una dieta sana y variada, evitando aditivos y contaminantes. Sólo en algunos casos, por enfermedad o problemas nutricionales, puede el médico aconsejar algunos suplementos.
Aunque está comprobado que el aroma de los alimentos pasa a la leche y puede hacer cambiar su olor y su sabor, no hay ningún alimento prohibido durante la lactancia. Esos cambios de sabor que experimenta la leche materna ayudan al bebé a familiarizarse con diversos sabores, lo que le permitirá aceptar más fácilmente la alimentación complementaria. Sólo en el caso de observar de forma repetida que tras haber comido la madre un determinado alimento, el bebé muestra algún tipo de molestias (vómitos, diarreas, erupciones, malestar o rechazo de la leche), puede ser necesario evitar ese alimento en concreto.
¿Puedo tomar medicación durante la lactancia?
Si necesitas tomar medicación durante el embarazo o tras el parto, puedes consultar con un médico. Recordarte que la mayoría de medicamentos pueden ser usados durante la lactancia. No todos los fármacos pasan a la leche y en general, prácticamente en todas las circunstancias pueden ofrecerse alternativas si el fármaco elegido conlleva algún tipo de riesgo. Puedes consultar la compatibilidad de medicación y lactancia en la página www.e-lactancia-org.
Conclusión guía lactancia materna para los primeros días.
Cada caso es único, y deberás de acercar estas recomendaciones al tuyo. Sin duda, la base está en que si tu decisión libre e informada es ofrecer a tu bebé lactancia materna, puedes hacerlo. Los principios pueden ser un poco difíciles por las dudas que genera esta nueva etapa, pero poco a poco con esta guía de lactancia materna iréis aprendiendo y afianzando la lactancia materna. Además, no dudes en apoyarte en tu matrona y grupos de lactancia que estarán encantadas de ayudarte en tu caso.