Una duda muy frecuente de los recién nacidos es cómo realizar un lavado nasal al bebé. Existe mucha cultura general sobre el tema, y es bien sabido que se puede hacer el lavado de la nariz a tu bebé, pero la realidad es que no del todo se hace bien.
Por ello nuestras matronas de Happymami han desarrollado el siguiente post especialmente para ti sobre la nariz tapada en bebés y lavado nasal.
Mi bebé respira raro, puede tener la nariz taponada
Primero debes saber que tu bebé, como todos los neonatos, son respiradores nasales obligados. Vaya que respiran por la nariz hasta las primeras 4-6 semanas de vida.
Esto, es debido a que su laringe presenta una posición más elevada que el niño o el adulto, teniendo casi en contacto la epiglotis con el paladar blando, lo que le dificulta el pasaje de aire a través de la boca, a excepción del llanto
. Por otro lado, es normal que los recién nacidos estornudan (les ayuda a limpiar las fosas nasales), tosan o tengan hipo. Parece una tontería pero hay muchos papás y mamás primerizas que consultan por estornudos.
Rinitis del lactante
Considerada la principal causa de obstrucción nasal para esta edad. Consiste en la inflamación de la mucosa nasal del bebé, y frecuentemente, de debida a un origen viral o inespecífico.
Síntomas de la rinitis del lactante
Los síntomas característicos son la respiración ruidosa y la dificultad respiratoria que empeoran durante la succión mientras amamantas. Uno de los signos y síntomas más característicos de la obstrucción nasal, es el cornaje.
Se trata de un ruido característico ocasionado por el paso de aire de forma “turbulenta” a través de las fosas nasales de tu bebé con un calibre disminuido.
Tu bebé no tendrá fiebre pero sí irritable, y sin mayor alteración. Y si elevas la nariz de tu bebé y con una adecuada iluminación, puedes observar mucosidad nasal.
¿Qué sistema de lavado nasal recién nacido es mejor?
Si vas a limpiar con suero fisiológico la nariz de tu bebé, podrás encontrar muchos sistemas diferentes en las farmacias. Todos son igual de válidos si los utilizas correctamente.
El consejo que nos da la AEPED es tener preferencia por los envases pequeños, así evitaremos hacer una utilización repetitiva del mismo frasco con cada catarro, favoreciendo la contaminación por gérmenes.
Además, también es importante que cada bebé tenga su propio dispositivo, para no contagiar los virus unos a otros.
¿Cómo realizar el lavado nasal de bebés?
A continuación te dejaremos un par de recomendaciones que te pueden ayudar mucho a realizar estos lavados nasales y a que sean lo más efectivos posibles.
- Haz los lavados nasales de tu bebé antes de dormir y antes de las tomas.
- Será suficiente con 1,5-2 ml en cada fosa nasal para bebés. Si es para un niño mayor con 5 ml es suficiente.
- Utiliza el suero a temperatura ambiente, así la sensación para tu bebé será menos desagradable.
- Puedes tumbar a tu bebé boca abajo o boca arriba, depende como mejor lo sujetes. Procura girar la cabeza hacia un lado e intentar que no se eche hacia atrás.
- Cuanto lo tengas bien colocado y sujeto, échale el suero fisiológico por el orificio que queda arriba, “con determinación”.
- Si está boca arriba, para facilitar que expulsa las secreciones, puedes sentar a tu bebé.
- Posteriormente, repite la maniobra en el otro agujero de la nariz, girando la cabeza de tu bebé hacia el otro lado.
- Si su nariz está muy obstruida, puedes echar un poco de suero, y darle un masaje para reblandecer y volver a echar más suero.
- Puede que haya parte de mocos que expulsen y otra parte que se los traguen, y es normal.
Además, te dejamos un video con la limpieza nasal del bebé que podrás ver cómo realizar el lavado nasal y que te será de gran ayuda.
¿Se puede aspirar al bebé la nariz?
Existen en el mercado diferentes tipo de aspiradores nasales para el bebé, tanto como sondas de aspiración hospitalarias. Y su uso está recomendado para una o dos veces al día, sólo sí hay mucho moco para aspirar (lo vas a ver) y sin hacerlo de forma brusca.
Esto es debido a que si hiciéramos uso de estas sondas de aspiración de forma continuada, podríamos generar en nuestro bebé una inflamación mayor y lesionar la mucosa.
Lo que empeoraría el cuadro clínico con la formación de sinequias (adherencias).
Obstrucciones nasal completa
Una obstrucción completa de la nariz de tu bebé puede llevar a consecuencias importantes, como dificultad respiratoria o retraso del crecimiento. Pero estas son por causas médicas que ahora vamos a describirte y que son diferentes de la mucosidad normal del recién nacido.
Signos y síntomas de la obstrucción nasal completa
En casos más graves, como son las obstrucciones nasales completas, podemos encontrar rinorrea, dificultad respiratoria (con aleteo nasal, retracción torácica, y cianosis cíclica). También, la apnea obstructiva, como la alteración en la alimentación, la epífora, y el retraso del crecimiento, la aerofagia con distensión abdominal, (la barriga llena de aire), son características de una obstrucción patológica. El diagnóstico debe efectuarse mediante una exhaustiva anamnesis y examen físico
Causas que provocan una obstrucción nasal completa
A nivel general y sin que nos asustemos, existen multitud de causas que pueden provocar una insuficiencia ventilatoria nasal de tu bebé, siendo detectadas si fuera el caso por el pediatra del hospital.
Para diferenciarlas, tenemos las causas congénitas, (desde el nacimiento) destacando la atresia de coanas, la estenosis congénita de la apertura piriforme, el quiste dermoide, el glioma y el encefalocele.
Esta obstrucción nasal bilateral, suele presentarse en periodo neonatal, en cambio, la obstrucción unilateral puede hacerlo más tarde en la vida.
Conclusión nariz tapada en bebés y lavado nasal
La obstrucción nasal en neonatos y lactantes presenta gravedad variable, desde dificultad respiratoria leve con la alimentación hasta obstrucción grave de la vía aérea. Aprender a realizar una correcta limpieza de la nariz de tu bebé no es difícil, y será cuestión de práctica dominarla.
Además, si tienes dudas de si es más que mocos, acude a tu pediatra que estará encantada de atenderte.
Recuerda que esta información no debe usarse como sustituta de la relación con tu pediatra, quien, en función de las circunstancias individuales de cada niño o adolescente, puede indicar recomendaciones diferentes a las generales aquí señaladas.